D.
Gonzalo Suárez Rendón Ximénez
(Militar Malagueño, Conquistador y fundador de la
ciudad de Tunja, Colombia)
Armas de Gonzalo Suárez Rendón |
Gonzalo Suárez Rendón y Ximénez nació en la
ciudad de Málaga entre 1500 y 1505, hijo de D. Rodrigo Suárez Rendón y de Dª.
Isabel Ximenez Suárez. Fueron sus hermanos Rodrigo Suárez Sabariego Rendón
Ximénez, Ana Suárez Rendón y María Suárez.
Sus antepasados fueron:
- D. Gonzalo Suárez Rendón,
natural de Jerez de la Frontera y conocido como Gonzalo Suárez de Xerez,
- D. Antonio Sánchez Rendón,
- D. Grací Rendón y Dª.
Catalina Suárez,
- D. ¿? Rendón,
- D. Garcí Pérez Rendón,
natural de Burgos.
Estando en campaña D. Garcí Pérez Rendón, y
hallándose entre la ciudad de Algeciras y la villa de Tarifa, observó que en el
campo se hallaban unas tropas moras y creyendo posible vencerlos y ganar el
campo, dijo a los que con el se hallaban: "a
ellos de rendón" y acometiéndolos con bravura y determinación los
derrotaron en batalla campal.
Por haber ocurrido esto sin conocimiento ni
orden del rey -D. Sancho IV de Castilla-, de forma precipitada y exponiendo a los hombres y al campo
cristiano, se enfadó enormemente, decidiendo castigar esa acción impetuosa,
pero al verle llegar con la lanza rota y ensangrentada y dando mil y una
excusas de forma tan honesta y humilde, así como haber sido informado del éxito
del lance, le dijo: "basta que lo
habéis hecho tan valerosamente que merecéis mucha honra y ser caballero",
a lo que D. Garcí Pérez le respondió que era hijodalgo y del noble linaje de
los Sarmiento, cosa que era conocida, y que le concediese el honor de seguir en
la guerra y morir en el servicio del rey, o sea, del Estado, y ante estas
palabras se sintió movido el rey a armarle como caballero notorio y darle nuevo
renombre - apellido- y armas, armándole Caballero de la Vanda, dándole el
apellido de Rendón en memoria del grito con el que atacó a los moros.
Así mismo, le dio escudo de armas, bandado
de revés, la banda de oro con cabezas de sierpes verdes, el campo de la banda de abajo de sinople por la
batalla y el campo de la banda de arriba gules por la sangre de los enemigos
derrotados, todo ello orlado por trece roeles de oro en campo gules -que eran
sus armas por su linaje Sarmiento- Todo esto tenía por timbre un yelmo con
lanzas de justar, algunas quebradas, y tres lanas, así como un blasón que dice:
"Vencer y nunca vencido".
Casó D. Gonzalo Suárez Rendón con Dª. Mecía
Figueroa Godoy, hija de Álvaro Suárez de Figueroa y de Dª. Ines de Godoy, quien
era nieta de D. Rodrigo Moscoso de Figueroa y de Dª. Isabel de Manjarres.
Álvaro Suárez de Figueroa, natural de la
ciudad de Badajoz, era del linaje de los Figueroa, duques de feria, y pasó a la
provincia de Santa Marta, en la actual Colombia, al poco de la conquista de esa
provincia. Yendo a conquistar nuevos territorios del Nuevo Reino de Granada,
falleció en la localidad de Vélez.
Bueno, pues tras estas líneas queda claro el
ascendiente de nuestro malagueño, su nobleza y la de su mujer. Ahora pasemos a
ver su mérito.
Don Gonzalo Suárez Rendón |
Como consecuencia de
imperativos de clase y posición y espoleado por el ardor que es propio de los
años mozos, pasó a servir al rey con las armas a Italia como soldado en la
Compañía de D. Luis de Ávila.
Pasó después a Hungría, pasando en estas dos
naciones cuatro años tomando parte en las batallas que en ellas se
sucedieron, hallándose en Pavía cuando
se produjo la rendición de esa ciudad y en el cerco a que fue sometida
Florencia, permaneciendo en el campo hasta su rendición. Posteriormente se
halló en las funciones habidas en Impol, Bulte y Railuciniano, así como en la
ocasión en que los florentinos realizaron una salida para intentar zafarse del
dominio español, encuentro que se saldó con la victoria de las armas españolas.
Tras estos hechos, pasó luego a Alemania y
nuevamente a Hungría, donde combatió al Turco, formando parte de la Compañía de
D. Pedro de Guzmán. Por sus buenos servicios y valor obtuvo su patente de
Capitán.
Una vez terminado su estancia en los campos
europeos, pasó a España, donde levantó a su costa una Compañía de Infantería
que se llevó a Túnez en abril de 1535, participando en las acciones bélicas que
restauraron la soberanía de España sobre Túnez y La Goleta, tras lo cual volvió
a España, donde volvió a levantar, también a su costa, una nueva Compañía, con
la que embarcó para la provincia de Santa Marta, en la actual Colombia, en la
Armada del Adelantado D. Pedro Fernández
de Lugo y una vez en el Nuevo Mundo participó en cuantas ocasiones fue menester
para conquistar y pacificar aquellos nuevos territorios, actuando en más de una
ocasión como jefe de las tropas, siendo herido varias veces, alguna de las
cuales le puso al borde de la muerte.
Cuando se decidió la conquista de la
Rinconada, Tamalameque y Las Argollas fue nombrado General de la expedición,
tras lo que pasó al Nuevo Reino de Granada, protagonizando junto a sus hombres
y otros españoles más su descubrimiento y conquista, ello al mando de su
Compañía, una de las ocho que participaron en esta jornada, la cual iba mandada
por el Adelantado D. Gonzalo Ximénez de Quesada y cuando este no estaba, a las
órdenes de D. Juan del Junco. Se halló D. Gonzalo Suárez Rendón en
prácticamente todas las acciones llevadas a cabo en este descubrimiento y
conquista.
Participó también en la fundación de la
ciudad de Santa F, la primera que se fundó en estos nuevos territorios
conquistados y fundó la ciudad de Tunja, de la que fue su Justicia Mayor
durante cuatro años. Desde esta ciudad envió a fundar la ciudad de Málaga, en
las quebradas de Tequia.
Cuando el Adelantado D. Hernán Pérez de
Quesada pasó a la conquista de la casa del Sol, nombró a nuestro malagueño por
Gobernador del Nuevo reino de Granada, tan grande era su prestigio y buen
hacer, siendo aceptado por tal en las cuatro ciudades del momento, a saber:
Santa Fe, Vélez, Tunja y Málaga, en sesión abierta de los respectivos cabildos
a los vecinos en el año de 1541 y como tal Gobernador realizó los
repartimientos y proveimientos de encomiendas de indios a los Encomenderos.
El mismo obtuvo las encomiendas de Icabuco,
Tibana, Ochonova y Guaneca, en el distrito de Tunja, con títulos de dieciocho
de febrero de 1540, veintidós de noviembre de 1543 y nueve de marzo de 1547,
dándosele un solar en la ciudad de Tunja, junto a la Iglesia Mayor, donde
edificó su vivienda, así como tierras de labor y para el pasto de ganado.
Sirvió al rey y a España con toda honradez y
eficacia, permaneciendo en cargos públicos de importancia hasta su muerte, la
cual le sorprendió en Tunja el año de 1579, habiendo otorgado testamento el día
catorce de septiembre de ese año, en el cual se hacía constar que dejaba cuatro
banderas y estandartes, una de ellas de
tafetán blanco, rayos azules y cruz dorada que trajo de España cuando
era Capitán.
También un guión estandarte de damasco
carmesí, que usó cuando era Justicia Mayor y Capitán general. También un pendón
estandarte de damasco azul, el que alzó cuando la aclamación de D. Felipe II.
y, por último, otro estandarte de damasco carmesí, que era el que indicaba que
era Capitán único de la gente de a caballo.
Todos estos ordenaba que se pusieran en su
capilla en la iglesia, la que quedaba más cercana a la del crucifijo de la Vera
Cruz y a la que dejó una suculenta capellanía dotada de con la renta de seis
tiendas de la plaza, prohibiendo que se sacasen
dichos estandartes de la capilla, excepto en el día y octavario del Corpus,
que se pondrían en su casa, tras lo cual deberían volver a su capilla.
En el año de 1615, su hijo Nicolás consiguió
que se pusiera el estandarte de la fundación en la Iglesia Mayor de Tunja
Por lo que se refiere a la fundación de la ciudad de
Tunja, no ha llegado a mis manos el
primer despacho que se emitió para ello, pero si el segundo y tercero, que son
los autos de fundación, los cuales rezan así:
"Yo, Gonçalo Ximénez, teniente de Gobernador
e de capitán General desta provincia de Santa Marta, por el ilustre y mui
Magnifico Señor Don Pedro Fernández de Lugo, Adelantado de las Islas de
Canaria, y Adelantado y Gobernador Perpetuo de de la Ciudad de Santa Marta y
sus Provincias por sus Magestades. Digo, que por cuanto yo por ciertas cosas
que conbienen al servicio de su Magestad y a la buena gobernación y pacificación deste
Nuebo Reyno de Granada, he resuelto fundar y poblar en la provincia de Tunja, y
para la buena gobernación de la dicha Ciudad y Provincia y para la pacificación
y quietud de los indios della, es necesario una persona tal para que la tenga a
cargo y vea y haga en ella las cosas que mas sean cumplidas al servicio de su
Magestad.
Por tanto, acatando la habilidad,
suficiencia y fidelidad de Vos el Capitán Gonçalo Suárez, a quien yo encomendé
la fundación de la dicha Ciudad para que la fundaseis y tomaseis possesión
della en servicio de sus Magestades en nombre desta Provincia de Santa Marta y
que sois persona que bien y fielmente guardareis el servicio de sus Magestades
y acatando que en el oficio de Capitán que habéis tenido y habéis servido a su
Magestaden esta conquista deste Nuevo Reyno y otras cosas que en vuestra
persona concurren; por tanto, por la presente nombro a Vos, el dicho Capitán
Gonçalo Suárez por Capitán e Iusticia Mayor en la dicha Ciudad de Tunja y
Provincia della, que tiene por términos e límite desde donde se acaba el Valle
del Espíritu Santo, de que es Señor Socota y comiença el Valle de la Trompeta
de que es Señor Tarmeneque, quedando por término a la dicha Ciudad de Tunja el
dicho Valle de Tarmeneque y por largo hasta el Valle de Onçaga e Suata, que lo
es postrero de lo descubierto por aquella parte, e por aquella parte de
Somagoso hasta el pueblo Fondo e de Tunja e su parage, que también Saquensipa,
entrando en estas travesías el pueblo de Somondoco, Señor de las Piedras, con
todos los Caciques y Señores que están en aquella Comarca de las Piedras, como
son Umequira y Tensucha, el Valle de San Juan y Ubeytay y el Valle de Murcia e
Ycabuco, Señor del Valle y Sipa Chiquito, con toda la otra tierra y Señores que
están dentro de la dicha tierra de Tunja, en la qual dicha Provincia podáis
hacer y hagáis el dicho oficio de Capitán y Iusticia Mayor.
E vos doy poder cumplido, según tal caso se
requiere, para que posáis ir en descubrimiento de la dicha tierra y Provincia
adelante a todas las partes que estuvieren por descubrir y azia la Mar del Sur
y azia la Mar del Norte, no estorbando ni llegando a estorbar las dos
conquistas y entradas y descubrimientos que se esperan hacer a la Casa del Sol
e de las Amazonas.
E ansí mismo podáis descubrir el Valle que
está entre el Pueblo Fondo y Onçaga, llendo por la travesía a pacificar e hacer
de paz a todos los Indios por do fuéredes y anduviéredes y traerlos a la
obediencia de su Magestad e a los que lo hizieren hazelles muy buenos
tratamientos, dándoles a entender las mercedes que sus Magestades les farán, e
a los que ficieren lo contrario hazelles guerra
como enemigos hasta traellos al servicio e obediencia.
E
que en la dicha tierra e Provincia y en los Pueblos que así descubriéredes e que de paz
fueren, depositeis a los Caciques a los Christianos para que les den de comer y
el servicio que hubieren menester y para que podáis oyr pleitos y sentenciarlos
y entrar en los Cabildos que se hizieren y tener voto e los votos que suelen
los que semejantes oficios tienen.
E para que podáis usar y exercer el dicho Oficio de Capitán e
Iusticia Mayor en la dicha Ciudad y Provincia de Tunja y en lo que assí
descubriéredes e hazer aquellas cosas e casos que se requieren al dicho ofizio,
teniendo en todo y reconociendo la superioridad a Fernán Pérez de Quesada, mi
hermano, y obedeciendo y cumpliendo lo que por el os fuere mandando como
teniente e Iusticia Mayor que en mi lugar queda en este dicho Nuevo Reyno.
E por el dicho cargo os sean guardadas todas
las preeminencias, exempciones e libertades que por razón de dicho oficio os
deben ser guardadas. El qual dicho cargo os doy e nombro por Capitán hasta
tanto su Magestad mande lo que sea servido y para todo vos doy poder cumplido
con sus incidencias e dependencias e con que en los dichos descubrimientos no entréis
en los límites y términos de la Ciudad de Vélez ni desta de Bogotá.
Fecho en esta Ciudad de Santa Fe a diez días
del mes de Mayo de 1539 años. El Licenciado Ximénez. Por mandado del Señor
Teniente, Pedro de Sotelo."
Otro sí:
"Yo, Fernán Pérez de
Quesada, Teniente de Gobernador e Iusticia Mayor en esta Provincia e Nuevo
Reyno de Granada, hasta tanto que su Magestad e el Señor Gobernador de la
Ciudad de Santa Marta en su real nombre otra cosa provea e mande & C. Digo,
que por cuanto el Señor Licenciado Gonçalo Ximénez, antes que desta Ciudad e
Reyno se partiese a dar quenta a su Magestad, mando a vos, el Capitán
Gonçalo Suárez, que con la gente de a pie e de a caballo que yo para ello os
diese, fuésedes a poblar e a fundar las Provincias de Tunja y fasta ahora, por
estar ocupado en las cosas de la guerra y expedición della, no se ha podido ir
a hazer la dicha fundación y al servicio de su Magestad conviene, con la mayor
brevedad que sea posible, se vaya a fundar y se funde la dicha Ciudad de Tunja;
porque mando a vos, el Capitán Gonçalo Suárez, pues sois Caballero y persona en
quien concurren las calidades que para semejante cargo se requieren y en quien
el dicho Señor Licenciado confió el dicho cargo y administración de la Iusticia
della, que con la mayor brevedad que pudiéredes después de yo ido a fazer esta
Jornada de la Casa del Sol, o antes, como por mi vos será mandado, vais a las
dichas Provincias de Tunja y en la parte y lugar que más conveniente vos
parezca para la sustentación de los Españoles vezinos que fueren de la dicha
Ciudad de Tunja, la pobléis y fundéis tomando la posesión en nombre de su
Magestad y del Señor Gobernador en su
Real nombre, haziendo la elección de Alcaldes y Regidores que se suelen y
acostumbran hazer, teniendo y guardando en todo la orden y forma que su
Magestad manda y nombrando y eligiendo los más ofizios de su Magestad vos
parezca convengan para la buena orden e perpetuación de la dicha Ciudad e para
que podáis nombrar y elegir a la persona
que vos parezca para Escribano Público del Cabildo de la dicha Ciudad, e a los
demás podáis dar y deis las provisiones que convengan ser dadas para el uso y
exercicio de los dichos oficios.
E otro si, para que a las entradas e
descubrimientos do no haya necesidad que vos en persona vais, podáis dar e deis
el poder que sea necesario, que vos dándoselo yo desde agora se lo doy y he por
dado. Y mando a la gente de a pie y de a caballo que para ello les diéredes lo
que por vos le será mandado para todo lo susodicho.
E para cada una cosa e parte de ello, vos
doy si necessario todo poder cumplido, arrimándome, aprobando y habiendo por
bueno el que del dicho Señor Licenciado tenéis, que es el de esta otra parte y
en todo y por todo como en él se contiene.
Y mando al cabildo, Iusticia Mayor y
Regimiento de la dicha Ciudad de Tunja que juntos en su Cabildo y Ayuntamiento
tomen y reciban de vos el juramento y solemnidad que de derecho se requiere y
así tomado vos reciban y admitan al dicho cargo y al uso y exercicio del,
porque yo desde agora para entonces y desde entonces para agora vos recibo y
admito al dicho cargo de Iusticia Mayor y Capitán de la dicha Ciudad de Tunja.
Y mando a todos los Capitanes, Caballeros,
hijosdalgo y hombres buenos que con vos a la dicha población fueren e a ella
vivieren que vos obedezcan e hayan e tengan por tal e cumplan vuestros
mandamientos como deben cumplir los míos como Iusticia Mayor que soy en este
dicho Reyno so las penas que vos de mi parte les pusiéredes, en las quales, lo
contrario faziendo, los he por condenados, por razón de la qual mando que os
sean guardadas las libertades e franquezas y exempciones e inmunidades que por
razón de lo susodicho vos deben ser guardadas, de lo qual vos mandé dar la
preferente, que es fecha en la Ciudad de Santa Fe a diez y ocho días del mas de
Junio de 1539 años. Fernán Pérez. Por mandado del Señor Fernán Pérez,
Christóbal Rodríguez."
Pues bien, una vez obtenidos los anteriores
documentos, procedió nuestro buen malagueño a aprestarse para emprender la jornada
que culminaría con la fundación de la ciudad de Tunja y tras reunir los hombres
y material necesario partió en su misión y llegando al lugar que se consideró
como más idóneo, ordenó se trazaran los límites de las calles, procediéndose a
la fundación el día seis de agosto de 1539, estando presentes como testigos los
siguientes individuos:
Fray Vicente de Requejada, Juan
de Pineda, Baltasar Maldonado, Alguacil Mayor del Reyno, Jorge de Olmeda, Pedro
López, Juan de Salcedo, Juan Izquierdo, Juan Delgado, Fernando de Escalante, Alonso
Martín, Juan López, Luis de Sanabria, y Juan Valenciano
La ciudad se fundó en el llamado Cercado de
Quiminça, en un llano del mismo nombre, que era el de un cacique. Al norte
lindaba por la derecha con el término de Santa Fe, que se hallaba a veintidós
leguas de distancia. El clima es frío, seco y aireado. La tierra es fértil,
pródiga en frutas, verduras y pastos.
Tras marcar el trazado de las calles, se
erigieron los principales edificios y la iglesia mayor, que fue consagrada a
Nuestra Señora de Guadalupe. Se puso horca y picota y se ordenó la construcción
de una fortaleza en un cerro que dominaba la población, con la superficie y
acondicionamientos necesarios como para albergar a los habitantes y ganados en
caso de peligro.
Nombró Gonzalo Suárez Rendón por sus
primeros Alcaldes ordinarios a Juan Pineda y Jorge de Olmeda. Así mismo nombró
a los Regidores, que fueron Juan del Junco, Gómez del Corral, Diego de Segura,
Pedro de Colmenares, Hernández Venegas y
Antonio Bermúdez. Por Alguacil Mayor nombró a Hernando de Escalante y por
Escribano Público a Domingo de Aguirre.
Todos estos individuos juraron sus cargos ante Suárez Rendón el dos de
enero de 1540.
Casa de
Gonzalo Suárez Rendón en Tunja
|
Le concedió el rey título de ciudad el nueve
de marzo de 1541, dándole también escudo de armas, el cual es como se ve en la
siguiente imagen:
Posteriormente, la ciudad contó con dos parroquias más,
así como con tres conventos de monjes: Dominicos, franciscanos y Agustinos, y
dos de monjas: de Santa Clara y de la Concepción. también se levantó un colegio
de la Compañía de Jesús y un hospital, a cargo de los Hermanos de San Juan de
Dios. Se edificaron, además, cuatro ermitas y en su término municipal, pero
alejada de la ciudad, se erigió el convento de La Candelaria y la Casa de
Nuestra Señora de Chiquinquirá. Todo esto que decimos debe entenderse que fue levantado entre el
año de la fundación de la ciudad y el año de 1674.
Catedral de Tunja |
El veinticinco de septiembre
de 1541, fue Gonzalo Suárez Rendón recibido por Gobernador del Nuevo Reino de
Granada y con este cargo y tras las consultas y deliberaciones oportunas,
ordenó al Acalde Ordinaro Gerónimo Aguayo partir con la gente necesaria a
descubrir, conquistar y pacificar tierras nuevas y fundar una nueva ciudad.
Efectivamente, en el último trimestre del
año de 1541 partió Gerónimo Aguayo a ejecutar la fundación, la cual se realizó
en las llamadas quebradas de tequia, entre Tunja y Pamplona.
Al mando de una tropa compuesta por cincuenta soldados y alrededor de veinte
caballos, cruzaron el río Chicamocha por la zona del Capitanejo, debiendo hacer frente a la resistencia ofrecido por
los Chitareros, los cuales fueron reducidos, procediéndose de inmediato a
formalizarse la fundación de la nueva ciudad.
Al día de hoy no ha sido
posible determinar la fecha exacta de la fundación, aunque los investigadores
la sitúan entre finales de marzo y principios de abril de 1542, estableciéndose
por convención el diez de marzo de ese año el día de la fundación.
Parque institucional García Rovira |
Fueron sus primeros Alcaldes
Ordinarios Pedro Rodríguez y Pedro Segovia y sus primeros Regidores Diego
García, Pedro Gutiérrez, Salvador Martín, Juan Trujillo, Lope Méndez, Juan de
la Cueva, Pedro Blasco, Martín Bejarano y Hernando Garibay. Fue Escribano del
Cabildo Martín Bejarano.
El nombre de Málaga lo fue como homenaje de
Gerónimo Aguayo a Gonzalo Suárez Rendón, dado que este era malagueño
Esta fundación duró poco tiempo, pues se
abandonó al año, poco más o menos, quedando como poblado de indios, hasta que en
1695 se refundó nuevamente como parroquia, de la que se conservan los archivos
sacramentales desde principios del siglo XVIII, así como sus párrocos,
costumbres y tradiciones
Asilo - Iglesia de San Antonio, Málaga |
Málaga 2016
Existe acta de fundación de Tunja. 6 de agosto de 1539.
ResponderEliminarMe encantaría poder leerla y tener copia de ella. ¿Es eso posible?.
EliminarGracias por haberse acercado a este blog. Un saludo