JOAQUÍN MORENO DE MENDOZA - BRIGADIER Y GOBERNADOR ®©

   Natural de Ronda. Nacido alrededor de 1715. Hidalgo.

   Ingresó en la clase de Cadete en julio de 1730, siendo su destino el regimiento de infantería de Vitoria.

   Pasó a Ceuta, donde permaneció durante veintidós meses, saliendo a petición propia a deshacer los ataques y baterías que habían tomado los moros, pasando después a formar parte de la expedición que se formó para la toma de Orán, desembarcando en esa ocasión y pasando a la acción, tanto en esa ocasión como en la segunda del veintiuno de noviembre de 1732.

   Pasó a la expedición de Italia, en toda la campaña de Lombardía del año de 1735 y toma de la plaza de Mirandola,donde hallándose herido el Subteniente de granaderos de su batallón, solicitó y obtuvo su mando.

   En febrero de 1740, ya como Capitán, pasa con su regimiento al refuerzo de la provincia de Caracas, hallándose el primero de febrero 1743 y durante tres días en el combate y bombardeo de la escuadra inglesa que atacó a la plaza de Guayana.

   Así mismo, hallándose en La Guaira, acudió a sofocar la sublevación de la provincia en la que no obstante ser el Capitán más moderno de su regimiento, a su solicitud salió destacado de dicha plaza a contener a los sublevados por las montañas, donde se atrincheró a media legua, en el puesto de las Tunas, y se mantuvo cerca de seis meses resistiendo las acometidas de los sublevados hasta su retirada, cumpliendo con sus objetivos, lo que le granjeó las felicitaciones de sus superiores.

   Pasó después a servir en 1756 el gobierno de Isla Margarita,  donde fabricó sin gastos para la Real Hacienda casa de Gobierno, cárcel, Real Contaduría y pósito, acrecentando, incluso, el Real erario, reedificando, además, las fortificaciones y templos de la isla, estableciendo cuerpos de guardia en muchos puntos de la isla e incluyendo a los habitantes en las milicias, con las que detuvo el comercio ilícito con los extranjeros, quienes en cuatro balandras armadas en corso intentaron realizar el comercio, consiguiendo rechazarlos en tres puertos, pasando luego éstos al de Manzanillo queriendo con prisas y violencias embarcar ganado, pero por la resistencia que se les opuso atacaron con cañones, matando a tres e hiriendo a cinco de los nuestros, incluidos un Sargento y un particular. Ante esta situación se desplazó a Curazao a demandar a las personas que sabía eran responsables de ese comercio y que se habían refugiado allí, pidiendo reparación por el agravio y las muertes ocurridas en tiempo de paz, lo que se le concedió mediante la sentencia a muerte de los capitanes de las balandras, tras lo cual mandó informe al Rey.

   En 1758 se le concede el hábito de Caballero de Santiago.

   Habiéndose vuelto a alborotar la provincia de Caracas, remitió como socorro al Comandante General Felipe Ricardos  una balandra llena de provisiones para las tropas de aquel Comandante, ofreciéndose, así mismo, a pasar él con quinientos hombres, por lo que obtuvo el agradecimiento de Ricardos.

   

Plano de la ciudad de Nueva Guayana y Angostura (Arch. Gral. de Indias)

  Hallándose detenida en Cumaná una expedición de límites por falta de auxilios y no recibirlos del Gobernador, se ofreció a su primer comisario para llevar las provisiones y dinero, embarcaciones y gente,  ejecutándolo con gran eficacia, consiguiendo poner en acción a las embarcaciones y su gente para que continuaran con su expedición por el Orinoco, habiendo antes dejado provisto a su primer comisario, José Solano, provisto de todo lo necesario para la construcción de veintiuna barcas.

   Posteriormente y como Gobernador, en 1762, como consecuencia de su mal emplazamiento y difícil defensa, se le confirió comisión para el río Orinoco y provincia de Guayana, realizando el servicio especial  de trasladar al vecindario y sus propiedades de aquella ciudad  a la angostura de dicho río cuarenta leguas más arriba, donde formó Compañías, construyó dos fuertes mayores que los previstos, cuarteles, pabellón, almacén, establecimientos de labranzas y hatos y otros menesteres, todo ello a pesar de los muchos trabajos, necesidades y enfermedades padecidos y de la falta de auxilios en los nuevos lugares, consiguiendo así extinguir el comercio furtivo en el Orinoco y que sangraba la provincia, realizando apresamientos de embarcaciones y contrabandistas, realizando con lo decomisado los encargos de su comisión, consiguiendo que toda la operación le costase a la Real Haciendo sólo 3.482 pesos. En 1766 entregó el mando de Gobernador al nerjeño Manuel Centurión Guerrero de Torres.

   Tras estos servicios pasó a ejercer en marzo de 1776 la Comandancia de armas y plaza del puerto de La Guayra, lo que realizó con gran interés y efectividad, concediéndosele el empleo de Brigadier  en junio de 1779, hasta que en noviembre 1786 el Rey determinó su retiro sin haberlo pedido D. Joaquín, por lo que el veinticinco de septiembre de ese mismo año escribió carta al monarca exponiéndole que quizás debido a algunos malos informes sobre su persona y contra su honor y conducta había éste caído en desgracia después de tantos años de servicios y con tanto honor, por lo que suplicaba se reconsiderara su situación y se le colocara según su graduación y méritos y en virtud de los informes emitidos sobre su gran aptitud para el desempeño de cualquier puesto de responsabilidad emitidos por sus superiores, el Capitán General de Caracas y el Intendente. Por todo ello, suplicaba al Rey le concediera la dirección del Gobierno y presidio de la isla de Santo Domingo o de la de Caracas. A esta petición se le respondió que el Rey estaba muy satisfecho con sus servicios y que el motivo de su retiro era proveer la plaza de Comandante del puerto de La Guayra a una persona más joven y vigorosa, pues así lo requería el Real servicio.

   El retiro fue en caracas y con el goce de un sueldo de tres mil pesos anuales. Falleció en esa ciudad de Caracas a últimos de 1792 o en los primeros meses de 1793.

   Tuvo, que sepamos, un hijo llamado Manuel, que fue también militar del batallón de Milicias regladas de Blancos de Caracas, que empezó a servir en 1781 y se halló en acciones de guerra. Ascendió a Capitán en mayo de 1793 y se retiró como Teniente Coronel en 1799. También tuvo una hija llamada Josefa.

   Se tiene constancia de que hacía sus pinitos con las letras, pues en 1743 escribió "El rasgo épico", donde ponderaba y exaltaba el triunfo de la armada española sobre los ingleses cuando estos trataron de apoderarse de las fortalezas de La Guyra y Puerto Cabello y donde él tuvo destacada participación. 

El Hoplita Malacitano

Málaga 2016